No me beses si vas a temblar,
si tu boca no sabe llegar,
si venís con la duda en los labios
y el miedo guardado detrás.

No me beses si no es con coraje,
si pensás corregir el paisaje
mientras yo me desnudo en tu orilla
esperando un amor sin maquillaje.

Diseñame un beso que arrase,
que no pida permiso al pasar,
que se quede, que marque, que abrace
y no sepa después disimular.

Que no sea un ensayo tímido,
ni un roce por casualidad.
Que sea el trazo definitivo,
el que no se puede borrar.

No quiero tu boca en piloto,
ni caricias que sepan a poco.
Quiero vértigo, arte y sentido,
no mitades ni gestos rotos.

Diseñame un beso sincero,
de esos que no saben huir.
No un suspiro cobarde y ligero,
sino un acto de sobrevivir.

Porque ya me besaron con miedo,
con distancia, con prisa, con sal.
Y esta vez, si te animás al fuego,
que sea real.