1. Las mariposas… prueban con los pies
Sí, leíste bien. Ellas no necesitan lengua para saber si algo es rico o no. ¡Tienen sensores de sabor en sus patitas! Imaginatelas caminando sobre una hoja diciendo: “mmm... sí, esto va con pesto”.

2. No pueden volar si tienen frío
Como si fueran celulares viejos en invierno. Las mariposas necesitan que su cuerpo esté al menos a 30°C para volar. Si no, se quedan re panquequeadas, esperando el sol como en una plaza un domingo.

3. Algunas fingen ser otras cosasTipo gente en redes sociales. Hay mariposas que parecen ojos de búho o serpiente cuando abren las alas. Todo para no ser comidas. Un aplauso para esa estrategia digna de catfish profesional.

4. Viven en modo “YOLO”Algunas mariposas adultas viven ¡solo uno o dos días! Ni alcanzan a pagar el monotributo. Pero en ese tiempo, comen, vuelan y ligan. Básicamente, el sueño de muchos humanos.

5. No todas son bonitas y coloridasAlgunas parecen hojas secas, literal. Pero pará… eso no es bajón, ¡es camuflaje ninja! Así que la próxima vez que veas una hoja sospechosa, capaz te saluda y todo.

6. Tienen memoria… pero selectivaLas orugas (antes de ser mariposa) aprenden cosas y ¡las recuerdan después de la metamorfosis! O sea que cambian de cuerpo, pero se siguen acordando de quién les hizo ghosting.

7.¡Pueden beber lágrimas!Algunas especies toman lágrimas de reptiles o aves. ¿Por sed? ¿Por drama? ¿Por nutrición? Nadie sabe bien. Pero claramente son intensas. Mariposa drama queen.

🦋 ¿Cuál te sorprendió más?
Contame si alguna vez tuviste una conexión mística con una mariposa... o si una te aterrizó en la cara sin pedir permiso.